But I Have Chosen Cremation

Across the nation, the percentage of people choosing cremation has been steadily increasing, with the cremation rate in the U.S. now exceeding 60% and Pennsylvania exceeding 55%. When speaking with families, we often ask, “Have you made your arrangements?” or “Have you thought about what will happen when you pass away?” The typical response is, “Oh, yes, I’m going to be cremated.” While this is a perfectly acceptable answer, our follow-up question, “But what are you going to do with your ashes?” is often met with responses like, “What do you mean?” or “Well, I hadn’t thought about that.”

Cremation itself is not a final disposition; it is only a step in the process. After cremation, someone must take responsibility for deciding what will be done with the ashes unless you have pre-arranged with a cemetery and chosen permanent memorialization.

We believe that cremated remains should be treated with the same respect and dignity as the human body. Therefore, they should be placed in a suitable container and interred or entombed in a cemetery. Practically speaking, many families we talk with have not given this next step much thought, often assuming their loved ones will handle those details.

Unfortunately, without clear direction regarding permanent memorialization, ashes are often kept at a loved one’s home. They may occupy a prominent spot initially, but as time goes on, they risk being moved to a shelf or closet or even forgotten, especially if the loved one moves, becomes ill, or passes away. In some cases, ashes are overlooked altogether when a home is sold, ultimately becoming lost. Or what if there was a loss due to fire or flood? We’ve even had families come to us with the ashes of multiple family members, unsure of how to provide permanent memorialization for them. Because we have witnessed these situations firsthand, we understand how important permanent memorialization can be for a family.

Next time, let’s discuss what permanent memorialization is and explore the options available to you.

Pero He Elegido La Cremación

A lo largo del país, el porcentaje de personas que eligen la cremación ha aumentado constantemente, con la tasa de cremación en los EE. UU. ahora superando el 60% y en Pensilvania superando el 55%. Al hablar con las familias, a menudo preguntamos: “¿Han hecho sus arreglos?” o “¿Han pensado en qué sucederá cuando fallezcan?” La respuesta típica es: “Oh, sí, voy a ser cremado.” Aunque esta es una respuesta perfectamente aceptable, nuestra pregunta que sigue es, “Pero ¿qué vas a hacer con tus cenizas?” y se encuentra con respuestas como, “¿Qué quieres decir?” o “Bueno, no había pensado en eso.”

La cremación en sí misma no es una disposición final; es solo un paso en el proceso. Después de la cremación, alguien debe tomar responsabilidad por decidir qué se hará con las cenizas a menos que haya hecho arreglos adelantado con un cementerio y elegido una conmemoración permanente.

Nosotros creemos que los restos cremados deben ser tratados con el mismo respeto y dignidad que el cuerpo humano. Por lo tanto, deben colocarse en un contenedor adecuado y ser enterrados o depositados en un mausoleo en un cementerio. Hablando prácticamente, muchas familias que hablamos con no han dado este siguient paso mucha reflexión, asumiendo que sus seres queridos manejarán esos detalles.

Desafortunadamente, sin una dirección clara respecto a la conmemoración permanente, las cenizas son frecuentemente guardadas en la casa de un ser querido. Pueden ocupar un lugar prominente inicialmente, pero cuando pasa el tiempo corren el riesgo de ser movidas a un estante o incluso olvidadas, especialmente si el ser querido se muda, se enferma o fallece. En algunos casos, las cenizas son completamente pasadas por alto cuando se vende una casa, convirtiéndose finalmente en pérdidas. ¿Y qué pasaría si hubiera una pérdida debido a un incendio o una inundación? Incluso hemos tenido familias que nos han traído las cenizas de varios miembros de la familia, sin saber cómo proporcionar una conmemoración permanente para ellos. Debido a que hemos presenciado estas situaciones de primera mano, entendemos lo importante que puede ser la conmemoración permanente para una familia.

La próxima vez, vamos a discutir qué es la conmemoración permanente y exploremos las opciones disponibles para usted.